Si te apetece vivir este año la experiencia, ¡aun estás a tiempo!
El Descenso Internacional del Sella reúne todos los años a decenas de miles de personas que atraídas por el ambiente festivo que se genera alrededor de la competición deportiva, acuden a la cita festiva más importante del verano asturiano.
Esta fiesta reúne varios aspectos: el deportivo, folclórico, mediático y festivo. Los chalecos, monteras piconas y collares de flores son objetos de culto al igual que la música en la calle, las tiendas de campaña, y la fiesta hasta el amanecer son también signos inequívocos de “les piragües”.
La competición deportiva, organizada por la Real Federación Española del Piragüismo y por el Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella, es retransmitida a todo el mundo a través de la televisión y se celebra el primer sábado de agosto posterior al día 2, a las 12:00 horas, por lo que este año se celebra este sábado, 8 de agosto. Tras la lectura del pregón por un famoso personaje público, los palistas toman la salida en Arriondas llegando a la meta tras 20 kilómetros en el puente de Ribadesella.
Los vencedores son condecorados en el Pódium de Vencedores del Sella por las autoridades presentes entre los que suelen encontrarse ministros, autoridades de la Comunidad Autónoma, y responsables municipales.
Se trata de una divertida experiencia que te llevará desde las instalaciones de Arriondas hasta Llovio, a los largo de 15 kilómetros de mínima dificultad. Se puede bajar de diferentes formas: solo, en pareja, en canoa de tres plazas, con tu mascota, etc. Puedes lanzarte desde la impresionante rampa de salida, solo apta para los más aventureros, o se puede empezar el descenso desde la orilla del río de forma tradicional.
El Albergue Juvenil Roberto Frassinelli, es el que más cerca se encuentra de este evento. Está situado en pleno paseo marítimo, al borde de la plata de Ribadesella, y se trata de una preciosa Casa de Indianos, totalmente remodelada.
Sobre la historia del nombre del albergue, os contamos que «Roberto Frassinelli», nació en Alemania, llegó a Asturias fruto de las desavenencias políticas que 
padeció en aquel país fruto de su militancia en un partido liberal romántico y aquí, en Asturias, el alemán de Corao (como se le conocía popularmente) inició la construcción de la basílica de Covadonga.
Frassinelli, que también fue escritor y teósofo, estudió rocas y minerales de la región de Picos de Europa y descubrió el dolmen de Abamia. En su honor se le puso nombre a este albergue pero también da nombre a cosas tan dispares como a una zona natural en los Picos de Europa conocida como el Pozu l’Alemán.
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