Entrevista a Thomas Borstner, fundador del Albergue La Ventana Azul de Gran Canaria sobre su nuevo proyecto sostenible.

¿Cómo se te ocurrió la idea de iniciar un huerto ecológico de frutas y verduras?

Bueno, durante la Pandemia de Coronavirus en 2020, como muchas otras personas, tuve mucho tiempo para pensar. Pude observar en los medios de comunicación las desventajas de la globalización. Cómo Europa hoy en día depende en muchos aspectos de los tejidos de Asia. Eso volvió a aclarar una vez más los problemas que tiene la humanidad con la globalización. Pero la idea de cultivar nuestros propios alimentos ecológicos no es nueva para mí, está en mi cabeza desde hace unos años.

¿Cuál es tu principal motivación para este proyecto?

Creo que, especialmente en una isla, es muy importante intentar ser lo más autosuficiente posible. Es muy arriesgado depender demasiado de la importación. Especialmente durante una crisis. Gran Canaria tiene un enorme potencial para la agricultura. Por su suelo, su clima y el buen acceso al agua dulce. Bucear en la agricultura en Gran Canaria es una verdadera aventura para mí porque hay muchas historias interesantes que escuchar y cosas que aprender. El sistema de antiguos acueductos que todavía se utilizan hoy en día y la forma en que los canarios comparten su agua dulce, dice mucho sobre lo valioso que es este elemento para la población local.

Mi motivación es tratar de mejorar el mundo un poco y quizás motivar a otros a cultivar su propia comida ecológica en casa.

¿Cómo pudiste finalmente hacer realidad esta idea?

Pues al final Claudia, una nueva amiga de Francia me recordó el proyecto de José. La finca donde comenzamos nuestro jardín Ventana Azul es al mismo tiempo la sede del proyecto de José  Mundo Creativo. Están organizando viajes para limpiar la isla y también están trabajando para crear su propia comida. Conozco a José desde hace muchos años, ya que él, al mismo tiempo que yo, abrió su propio albergue en Las Palmas. José está haciendo muchos proyectos interesantes, como también una nueva y creativa plataforma de viajes. Después de hablar con José tuve la sensación de que estábamos avanzando en la misma dirección y no había más dudas de cómo y dónde empezar finalmente mi segundo huerto ecológico. También mi amiga Juliette me presentó a Salva, quien será la persona que nos ayude a iniciar este proyecto. Y José me presentó a Charlie de Argentina, quien cuidará de nuestros “bebés verdes” después de montar el jardín. Gracias a su educación y habilidades especiales tenemos grandes esperanzas de que nuestro huerto no se convierta en un desastre.

¿Puedes contarnos más detalles sobre la ubicación?

¡Claro! Fue una búsqueda bastante larga para encontrar un terreno cerca de Las Palmas y no muy lejos en las montañas, ya que puede hacer bastante frío allí y todas las frutas tropicales no podrían crecer allí. El huerto Ventana Azul se encuentra dentro de la finca de MundoCreativo en el auténtico pueblo de Tenoya. ¡A solo 12 minutos en coche de nuestro albergue! Eso hará que sea muy fácil transportar la comida al albergue.

¿Estamos hablando de comida ecológica “gratis”?

Jaja, está bien, no mencioné esto todavía. Entonces, la idea es producir nuestra propia comida ecológica e incluirla gratis en el precio que pagan nuestros huéspedes por su cama en la playa de Las Canteras. Queremos hacer esto para animarlos  a comenzar proyectos similares en su país o tal vez solo para hacerlos sentir un poco más amados y cuidados.

Entonces, ¿Cómo se vincula el albergue con este huerto ecológico?

Como dije semanalmente entregaremos comida gratis al albergue pero también queremos organizar eventos y charlas sobre agricultura sustentable y ecológica dentro del albergue. Creemos que en el año 2021 las empresas, así como todas y cada una de las personas, tienen la gran responsabilidad de cuidar más nuestro planeta. Lo bueno de tener un albergue es que puedes llegar a muchas personas. Últimamente me acabo de dar cuenta de que más de 10.000 personas se han alojado en nuestro albergue en los últimos 9 años.

Además, una vez que la pandemia esté bajo control, comenzaremos a organizar visitas y pequeños viajes a la finca MundoCreativo para aquellos huéspedes que estén realmente interesados ​​en ver de dónde viene su deliciosa comida ecológica. También estamos planeando con José conectar los viajes que está organizando con nuestro albergue. Pero debemos ser un poco más pacientes hasta que finalmente ganemos la pelea contra la Covid19.

¿Qué tipo de frutas y verduras se cultivan en el huerto ecológico Ventana Azul?

Bueno, lo que hace que la agricultura sea especialmente gratificante e interesante en Gran Canaria es el hecho de que, literalmente, puedes cultivar cualquier cosa en esta increíble isla. Debido a su clima cálido y perfecto, incluso frutas tropicales como mangos, frutas del dragón, y plátanos crecen en esos valles cercanos al nivel del mar. Personalmente, también me encantan los enormes árboles de higuera y aguacate que se extienden por toda la isla. Nuestra producción también incluirá frutas más tradicionales como fresas y frambuesas. Luego tendremos toda la gama de verduras como patatas, cebollas, ensalada y calabacines.

¿Quieres aportar alguna otra cosa más sobre el nuevo huerto ecológico Ventana Azul?

Sí, en realidad tengo más cosas que decir jaja. Bueno, también creo que cultivar tu propia comida es más que obtener comida local y saludable. La comida también es una forma de conectarnos con nuestra gente. En un mundo que debido a la digitalización, irónicamente, parece cada vez más conectado y aislado al mismo tiempo, creo que compartir algo que importa en la vida real es una gran ventaja para mi vida. Y espero que también pueda serlo para otros. Durante el encierro de Covid, muchos de nosotros hemos estado aislados en nuestros  hogares y la única excusa para salir de la casa era para comprar comida. Espero que no olvidemos estos tiempos difíciles, cuando nos sentamos juntos en nuestro jardín y nos conectamos entre nosotros. No solo se trata de ir al huerto  Ventana Azul para conseguir comida, sino también para compartir nuestro tiempo, contarnos historias… Quizás sea un poco más humano. Así que la idea también es convertirlo en un punto de encuentro entre amigos locales y turistas curiosos. Algunos de mis amigos ya manifestaron su interés en ser parte de esto.

¿Cómo definirías  con un poco más de detalle lo que quieres decir con «ser humano»?

Bueno, lo que quiero decir es que espero que este proyecto ayude a algunas personas a volver un poco más a nuestras raíces. La comida como regalo de la tierra. Cambiamos tiempo por comida. Por eso es especialmente importante para Ventana Azul que la comida sea gratis. En un mundo que ve sus propios recursos devorados por un capitalismo sin fronteras y totalmente desatado, tal vez podamos intentar crear una pequeña burbuja donde el dinero no esté constantemente presente. Veremos si esto es solo una ilusión.

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